Aprender a fotografiar los fuegos artificiales
Las fotos de los fuegos artificiales son algo muy específico. A primera vista, parece que no presentan ninguna complicación, pero si queremos tener las mejores fotos, hay ciertas reglas que nos convendrá seguir. Descubre cómo.
Los fuegos artificiales no son sólo típicos de la Nochevieja. También los encontramos en grandes celebraciones, bodas o incluso espectáculos. A menudo, tenemos la oportunidad de fotografiar una representación de luces en algún tipo de teatro al aire libre.
Revisa el equipamiento
Antes de salir a fotografiar los fuegos artificiales, echa un vistazo al equipamiento. En este caso, son más válidos que nunca los consejos de que el tiempo es oro y de que no tendremos una segunda oportunidad. Entonces, ¿en qué tenemos que centrarnos?
- Batería: hay que asegurarse de cargarla completamente, lo ideal sería tener otra de repuesto. Las exposiciones largas gastan mucha batería.
- Objetivos: probar que todo funciona sin problemas y comprobar que no haya manchas en la lente. Al fotografiar de noche, podrían causar molestos «desenfoques locales».
- Disparador a distancia: si no disponemos de un disparador de cable, intentaremos utilizar el mando a distancia. Esto también requiere más energía, por lo que es mejor contar con una batería de repuesto.
- Trípode: asegurarse de que está en orden, es mejor colocar en casa la placa del trípode para sujetar la cámara. En la oscuridad, nos costará más.
- Una bolsa con alubias: es conveniente llevar una bolsa para estabilizar la cámara. No siempre disponemos de las condiciones ideales para montar un trípode. Si nos apoyamos en un muro, lo mejor será colocar la cámara sobre una bolsa con alubias o con arroz
- Tarjeta de memoria: antes de salir, es mejor formatearla, para asegurarse de que está vacía y de que tendremos espacio para las fotos. Por otro lado, no hay necesidad de disparar tres veces cada cohete. Después, poner orden en las fotografías de fuegos artificiales suele ser complicado, sobre todo porque nos da pena eliminar tantas imágenes utilizables.
Con todo esto, ya tenemos claro lo que necesitamos para fotografiar fuegos artificiales. Al mismo tiempo, merece la pena llevar algunos objetivos más. En general, no sabemos de antemano cuál va a ser la composición de los fuegos artificiales. Ni si, además de un amplio focus para capturar el conjunto, también necesitaremos un objetivo largo para «acercar» lo que vemos en el cielo.
Escoge el sitio adecuado
Si es posible, comprueba el día anterior el sitio en el que tendrán lugar los fuegos artificiales, para así averiguar cuál es la mejor vista. Después, acude al evento con antelación, para que no te roben el sitio.
También ten en cuenta que, durante una hora larga, habrá un montón de gente. Por lo tanto, será mejor vigilar bien el trípode y la cámara, para que nadie lo golpee o robe.
Ajusta la cámara
Para fotografiar fuegos artificiales es importante que la cámara sea capaz de trabajar con el modo de exposición manual (M). Este es el mejor para disparar fuegos artificiales.
De igual manera, deberemos elegir el enfoque manual, ya que tendremos que enfocar al infinito. El enfoque automático probablemente se confundiría.
El enfoque (focus) lo configuraremos en función de las circunstancias. Si nos encontramos cerca de los fuegos artificiales y queremos incluir también los alrededores, escogeremos un objetivo gran angular. Si fotografiamos detalles, o nos encontramos lejos, seleccionaremos un enfoque entre de 50 y 100 mm, más o menos.
El diafragma
Para conseguir un enfoque perfecto, seleccionaremos una apretura (diafragma) media: esto es, aproximadamente F5.6 – F8. El uso de un trípode nos permitirá evitar el desenfoque debido al movimiento.
Sensibilidad
Deberemos escoger una sensibilidad tal, que el ruido de la imagen no sea significativo. Los valores específicos dependerán de lo que la cámara admita. Gracias al trípode, por lo general, no tendremos que utilizar valores de la ISO por encima de 400, incluso si elegimos tiempos largos.
Tiempo
El tiempo de exposición dependerá de lo que queramos reflejar exactamente en la foto. Un tiempo demasiado corto sólo permitirá capturar la explosión en el cielo, mientras que uno demasiado largo, provocará que se vea como si fueran chorros de metal fundido. Intentaremos establecer un tiempo entre medio segundo y cinco segundos, a continuación, editaremos la imagen resultante de acuerdo con nuestras preferencias.
También se puede a mano
A veces puede ocurrir que los fuegos artificiales nos cojan de improviso, por ejemplo, porque sean una sorpresa. En ese caso, lo más seguro es que no tengamos a mano un trípode. Pero no importa, trataremos de disparar a pulso.
Lo único, es que entonces, habrá que trabajar con otros valores de exposición. Seleccionaremos el tiempo alrededor de 1/30 de segundo, para que seamos capaces de tomar unos planos en condiciones. La apertura deberá estar entre 3.5 y 5.6 y la ISO, aproximadamente, en 1600. Como el cielo es negro, se verá mucho ruido, pero podremos reducirlo fácilmente en Zoner Photo Studio.
Fotografiar fuegos artificiales sin trípode, obviamente no es lo ideal. Sin embargo, cuando nos encontramos inesperadamente con unos, sería una pena no intentar capturarlos.
Añadir algunas personas a la composición de fuegos artificiales
Al disparar fuegos artificiales, deberemos reflexionar sobre qué es lo importante en la situación dada. Si son el punto culminante de un día de boda, sin duda es el lugar para tomar una imagen de los recién casados mientras lo miran.
El cómo jugaremos con la composición, dependerá sólo de nosotros. Los fuegos artificiales pueden combinar bien con prácticamente cualquier cosa: por ejemplo, con el coche de boda aparcado.
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