Cómo fotografiar a la gente a la altura (adecuada)

Cómo fotografiar a la gente a la altura

Cuando fotografiamos a alguien de cuerpo entero, el resultado variará considerablemente en función de la altura a la que tomemos la imagen. Si tomamos la fotografía desde muy arriba, la figura puede salir deformada; puede ser, por ejemplo, que las piernas parezcan mucho más cortas de lo que son en la realidad. Observa la siguiente serie de fotos, donde puede compararse la influencia de la distancia y de la altura en al fotografiar a personas.

La inspiración para escribir este texto me vino de una de las muchas fotos que he visto en Facebook. Se trataba de una imagen corriente, hecha por un aficionado con el móvil. En ella, el desconocido fotógrafo capturó la figura de cuerpo entero de una chica. La fotografía no tenía nada de especial, pero mirándola más detenidamente, se notaba que había algo raro: estaba claro, la diferencia de alturas entre la persona que tomó la foto y la que posaba era considerable, porque la foto se veía como tomada desde arriba.

No quiero con esto parecer una especie de árbitro o el único que sabe cómo hacer una foto correctamente, sin embargo, creo que está bien darse cuenta de lo que son los planos extremos. El principio es que así se destaca una determinada perspectiva, haciendo más pequeñas las partes del cuerpo más alejadas del objetivo. En otras palabras: las piernas de la modelo parecerán más cortas en la foto.

Distintas alturas

Para ilustrar el problema, he tomado una serie de fotos desde una distancia aproximada de dos metros y a distintas alturas. Yo mido 193 centímetros, así que la primera foto puede parecer exagerada, pero de verdad es una foto normal tomada con una cámara réflex a la altura de los ojos (no hemos calzado a la modelo, pero al menos, está bien saber cómo se ve la parte inferior de las piernas).

Cómo fotografiar a la gente: Fotografía tomada a mi altura natural.
Fotografía tomada a mi altura natural.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía un poco por debajo de los hombros.
Fotografía un poco por debajo de los hombros.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía a la altura del ombligo.
Fotografía a la altura del ombligo.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía a la mitad de los muslos.
Fotografía a la mitad de los muslos.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía casi desde el suelo, por debajo de las rodillas.
Fotografía casi desde el suelo, por debajo de las rodillas.

La foto al comienzo del artículo sirve para comparar las diferencias. Cuanto menor es la altura, mayor es el efecto óptico de alargamiento de las piernas.

Por otra parte, es necesario tener en cuenta la sombra por debajo de la barbilla, ya que, también puede jugar malas pasadas. Esta sombra es más acusada cuanto menor es la altura. Fotografiar a alguien desde el nivel de las rodillas, como en este caso, es más bien algo extremo. Puede usarse cuando el objetivo sea alargar notablemente las piernas (por ejemplo, si hacemos una foto de unos pantalones extravagantes).

A mayor distancia

Las fotos de arriba sirven para mostrar este efecto. En la práctica, no fotografiaría desde tan cerca, ya que la distancia a la modelo también influye sobre la apariencia de su figura.

Para mostrarlo, adjunto una serie de fotos tomadas al doble de distancia, esto es, a unos cuatro metros de la modelo.

Cómo fotografiar a la gente: Fotografía tomada a mi altura natural.
Fotografía tomada a mi altura natural.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía un poco por debajo de los hombros.
Fotografía un poco por debajo de los hombros.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía a la altura del ombligo.
Fotografía a la altura del ombligo.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía a la mitad de los muslos.
Fotografía a la mitad de los muslos.
Cómo fotografiar a la gente: Fotografía casi desde el suelo, por debajo de las rodillas.
Fotografía casi desde el suelo, por debajo de las rodillas.

Ahora, las diferencias no son tan acusadas, sin embargo, sabiendo que existen, es posible percibirlas también aquí. Precisamente por ser tan sutiles, pueden ser problemáticas: un espectador sin experiencia (o un fotógrafo) será consciente de que algo está mal, pero no sabrá cuál es el problema exactamente. 

Resumen

Personalmente, suelo escoger la opción intermedia y tomo las fotografías desde la altura aproximada del ombligo.

Por otra parte, reconozco que cuando se trata de niños o de animales, es mejor fotografiarlos a su altura; pero en general, es suficiente con sacar la foto a la altura de sus ojos.

Dada mi estatura, estoy acostumbrado a que, al sacar fotos en mi estudio, tengo que agacharme; así que, si estáis en una situación parecida, es posible que os venga bien un par de rodilleras.